Campaña ropa limpia
Han trascurrido dos años desde que cuatro grupos de accionistas presentaron una propuesta a Disney para que pusiera fin a los talleres clandestinos que tenía en China. La Junta de Disney, en vez de adquirir un compromiso serio para resolver los abusos laborales que estaban cometiendo sus proveedores, desvió la atención al Proyecto Kaleidoscope. Éste era un programa piloto, basado en la formación y que tenía el objetivo de implantar un código en diez fábricas de China que trabajaban para Disney y MacDonald´s. Sin embargo, tras un periodo de tiempo más que razonable, el informe final de dicho proyecto, que la Junta de Disney esperaba publicar para principios del año 2006, todavía no está disponible.
Así las cosas y dado que la reunión anual de accionistas de la denominada fábrica de los sueños se celebra el próximo 6 de marzo en Albuquerque, Nuevo México, SACOM (ONG de Hong Kong que lucha por los derechos de los trabajadores en China) exige que John E. Pepper, Presidente de la Junta de accionistas, divulgue la información del Proyecto Kaleidoscope y garantice su transparencia. A esta reivindicación se une la Campaña de Ropa Limpia, que muestra todo su apoyo y la total conformidad con sus peticiones.
Cabe destacar por otra parte, que en los últimos dos años y medio, esta organización ha destapado la existencia de once talleres clandestinos en la región del Río Perla Delta del sur de China. Las investigaciones prueban procesos ilegales a la hora del pago de salarios, exceso de horas extraordinarias, la no realización de contratos ni pagos a la seguridad social, inseguridad en el trabajo y condiciones laborales humillantes y muy por debajo de unas condiciones de vida dignas.
¿Qué se reivindica?
SACOM ha pedido en reiteradas ocasiones tener un cara a cara con el representante de Disney para que se aplique un código de conducta en China. Sin embargo, a fecha de hoy, lamentablemente no ha habido respuesta por parte de la multinacional a ninguna de las tres cartas enviadas el 24 de agosto de 2005, el 8 de diciembre de 2006 y el 2 de enero de 2008, respectivamente.
De manera que según apunta la Coordinadora de SACOM, Jenny Chan, Disney ha negado su responsabilidad social en hechos como los siguientes: a menudo se trabajan los siete días de la semana y 16 horas al día haciendo juguetes para la factoría. Los trabajadores sufren falta se sueño y continuos accidentes laborales debido a las precarias condiciones de las instalaciones y a las largas jornadas. Además de verse obligados a trabajar en condiciones infrahumanas tiene prohibido hablar de su situación con otras personas u organizaciones. La mayoría de los trabajadores deben firmar acuerdos en los que no quedan reflejados asuntos fundamentales como el salario y las horas de la jornada laboral. Una vez firmados, los jefes de las empresas rellenan los espacios en blanco referidos a dichos asuntos como lo estiman oportuno y con el único fin de falsificar las auditorías sociales.
La responsabilidad de Disney
Disney ha contratado un servicio de auditoría, "Verité", para investigar los presuntos abusos laborales. Sin embargo, los informes de las auditorías nunca se comparten con SACOM y los interesados.
Así las cosas, la CRL exige que Disney dé a conocer la lista de los proveedores que no cumplen con códigos éticos, tal y como ya han hecho empresas como Niké y Adidas, y por supuesto, que dé una copia escrita del contrato a cada trabajador, tal y como refleja la nueva Ley de Contrato de Trabajo que entró en vigor con fecha del 1 de enero de 2008. Asimismo, la multinacional debe respetar el derecho de los trabajadores a desarrollar mecanismos democráticos de representación en todas las empresas proveedoras.
Disney registró nada más y nada menos que 35,5 millones de dólares en ventas el pasado año 2007. Así, los inversores y los consumidores saben que esta factoría lo puede hacer mucho mejor y adquirir un compromiso de cara a respetar los derechos de los trabajadores. Independientemente de las mejoras que Disney realiza, tiene que realizar un esfuerzo por trabajar con el público para mostrar su voluntad de cumplir con las promesas reflejadas en su código de conducta.
Campaña Ropa Limpia propone dirigir una carta al presidente de Disney en España para denunciar las condiciones laborales en las que trabajan los empleados de las empresas chinas que fabrican sus productos.
0 comentarios