Blogia
Cierzo

Deseo

DESEO Rabindranath Tagore
Deseo decirte las palabras más profundas, pero no me atrevo, pues temo tu burla. Por ello me río de mí mismo y transformo en bromas mi secreto. Me burlo de mi dolor, para que no te burles tú.

Deseo decirte las palabras más sinceras, pero no me atrevo, pues temo que no me creas. Por ello las disfrazo de mentiras y digo lo contrario de lo que pienso. Me esfuerzo en que mi dolor parezca absurdo para que no te lo parezca a ti.

Deseo decirte las palabras más valiosas, pero no me atrevo, pues temo no ser correspondido. Por ello te nombro duramente y me enorgullezco de mi insensibilidad.
Deseo sentarme silenciosamente a tu lado, pero no me atrevo, pues temo que mis labios traicionen mi corazón. Por ello hablo disparatadamente, escondiendo mi corazón tras mis palabras. Trato a mi pena con dureza, para que no lo hagas tú.

Deseo alejarme de ti, pero no me atrevo, pues temo que descubras mi cobardía. Por ello levanto la cabeza y me acerco a ti con aire indiferente. La constante provocación de nuestras miradas remueve mi dolor sin piedad.


SI... Rudyard Kipling
Si conserváis la calma mientras todos
la cabeza perdieron y os censuran;
sin en vosotros creéis, sin ofenderos
de que os pongan los otros bajo duda.
Si al mendaz toleráis sin ser mendaces;
si esperáis sin fatiga ni cansancio;
si no pagáis el odio con el odio,
sin por ello tomar aires magnánimos.
Si pensáis y soñáis sin a los sueños
o el pensamiento hacer vuestro objetivo;
si sabéis afrontar el fracaso y el triunfo
a entrambos presentando un rostro mismo.
Si soportáis que la verdad que hablasteis
la truequen en embuste gentes necias;
si las cosas que hicisteis veis caídas
y las habéis de alzar sin herramientas.
Si cuanto con trabajo conseguisteis
a un solo golpe lo arriesgáis de suerte
y sabéis, perdiendo vuestra vida,
hacer que en el principio recomience.
Si vuestro corazón y vuestras fibras
servir hacéis, aun cuando estén deshechos
y si sabéis luchar, faltando todo
salvo la voluntad, que dice: Quiero.
Si frecuentando al vulgo os guardáis sabios
y si sensatos al tratar a reyes;
si a todos apreciáis y poco a todos
y nadie, amigo o no, dañaros puede.
Si a sesenta segundos de distancia
el minuto alejáis de odio y reproche,
vuestra es la tierra con cuanto contiene
y, lo que es más, oh hijos, seréis hombres.

He leído en una revista feminista que las obras Deseo, de Rabindranath Tagore y Si... (If), de Rudyard Kipling son claramente machistas.

Según el artículo, en Deseo queda de manifiesto la incapacidad de los hombres para hablar de sus emociones y sentimientos, de su cobardía para comprometerse en una relación afectiva. Si... refleja el carácter combativo del macho de la especie, que tiene que mostrarse fuerte y duro en cualquier circunstancia, por adversa que ésta sea, y jamás puede permitirse una reacción que pueda interpretarse como signo de debilidad.

La literatura se presta a interpretaciones, por eso hay tantas versiones de una obra como lectores se aproximan a ella. Para mí Deseo y Si... nacen de lo profundo de dos seres humanos, tanto da que sean hombres y poetas. En Deseo habla un corazón enamorado que no sabe muy bien cómo manejarse con este sentimiento. ¿Acaso el amor no nos desborda y nos vuelve irracionales a todos? En Si... habla un padre, intenta que sus hijos sean personas de bien: hombres, no representantes del sexo masculino o de un modelo caduco de virilidad, simplemente hombres, con todo lo que de miseria y grandeza implica el término.

0 comentarios