Cosas que ocurren en España
El panorama, tal y como lo vemos los ciudadanos, es que los políticos que elegimos para gestionar España son parte del problema y no parte de la solución. El pilar económico que sustenta al Estado son los impuestos. Visto que apretarse el cinturón indefinidamente por la vía del recorte no solventa nada y nos crea más problemas, y que la reducción del déficit provoca el enquistamiento de la crisis, lo que está sobre la mesa de debate en estos momentos es algo que algunas fuerzas de izquierdas hace años que predican en el desierto. Y es que si hay una disminución de los ingresos producto de la crisis económica o bien se reducen gastos o bien se aumentan los ingresos subiendo los impuestos. Resulta paradójico que hayan sido los ricos de los países con un Estado del Bienestar más desarrollado las voces críticas con sus gobiernos neoliberales, me da igual que ellos se hagan llamar conservadores o socialistas, coincidiendo así con las tesis de partidos como Die Linke o, aquí, Izquierda Unida.
El caso español es más grave. Aquí no es que los que más tienen deberían pagar más, es, simplemente, que tendrían que pagar. El artículo 31 de la Constitución dice que todo el mundo contribuirá a sostener los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica mediante un sistema tributario justo inspirado en los principios de igualdad y progresividad. La realidad es justamente la contraria: cuanto más se ingresa, menos se paga proporcionalmente. Las fórmulas son variadas y ni siquiera es preciso defraudar a Hacienda, y eso que esta práctica ilegal se halla ampliamente instaurada en nuestro país, aunque quien tiene menos posibilidades de hacerlo son los asalariados y los que más, las grandes fortunas.
España es un país curioso. Cada año, cuando el Estado hace el resumen de cómo ha ido la recaudación del impuesto sobre la Renta, sale un dato que no por recurrente deja de sorprender: los empresarios declaran haber ganado menos que la media de sus asalariados. Lo desconcertante es que Hacienda se lo cree.
0 comentarios