Blogia
Cierzo

Error de cálculo

Dios dijo: Hay que compartir, así que los ricos tendrán comida y los pobres apetito. Michel Colucci

Como la industria de la biotecnología y los productos transgénicos no logran legitimarse y abrir mercados, Estados Unidos a tenido una idea brillante: ha invitado a 150 ministros de 100 países del Tercer Mundo a la Conferencia Ministerial y Exposición Internacional sobre Ciencia y Tecnología Agrícola que se celebrará a finales de junio en Sacramento, California, para discutir "cómo la ciencia y la tecnología, en un ambiente normativo de apoyo, pueden impulsar el aumento de la productividad agrícola y el crecimiento económico para así aliviar el hambre y la pobreza mundiales". Los objetivos reales de la conferencia son claros: promover los alimentos transgénicos y otras tecnologías aplicadas a la producción agrícola, todas en manos de empresas trasnacionales, informar a ministros del Tercer Mundo sobre cómo deberán ser las leyes que tienen que elaborar en sus países para permitir que esas mismas empresas trabajen tranquilas sin que les estorben leyes ambientales, propiedad de patentes, etc. y asegurarse el apoyo de países del Tercer Mundo en la próxima reunión ministerial de la OMC en Cancún. En el caso de no lograr acuerdos satisfactorios para Estados Unidos, habrá chantajes o presiones directas, recursos más que habituales aplicados en casi todas las negociaciones en Naciones Unidas y otros foros internacionales. Subsidiando a las trasnacionales con dinero público, el gobierno estadounidense utiliza a los hambrientos y a los países del Tercer Mundo para que las corporaciones puedan aumentar sus ganancias en nombre y a costa de ellos. Me parece que las mentes ¿pensantes? de Estados Unidos no han caído en la cuenta de que con los transgénicos puede aumentarse enormemente el volumen de la producción de alimentos, pero los ciudadanos del Tercer Mundo no tienen dinero para comprarlos.

0 comentarios