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El papel ha muerto. Viva el "e-papel"

El papel ha muerto. Viva el "e-papel" El prototipo sueco cuenta unas dimensiones sensiblemente inferiores a los actuales periódicos impresos. Ni formato sábana, ni tabloide. Ni siquiera arrevistado. La propuesta sobre la mesa es una pantalla táctil flexible y ligera de un tamaño A5, es decir, la mitad de un folio A4: 148,5 por 105 milímetros.
La apuesta parece coincidir con la actual tendencia en el mundo de los medios impresos. Los sábana centroeuropeos y anglosajones han comenzado a convertirse en tabloides (“edición compacta” los llaman en Gran Bretaña para evitar coincidir con los tabloides sensacionalistas), como lo ponen de manifiesto los notables ejemplos de The Times y The Independent. Mientras, las revistas femeninas empiezan a migrar hacia el ‘mimi’ y casualmente coinciden con el formato que se maneja para el periódico en ‘papel electrónico’.

“La actual tendencia en los periódicos impresos es el tabloide. Es una cuestión comercial, pero cada vez veremos más y más diarios con el formato (tabloide) del gratuito 20 minutos y los jóvenes lectores quieren periódicos más pequeños del tamaño de las revistas”, dice Bröstom.

El estudio de mercado realizado en Suecia indica que el 79% de los jóvenes de 17 a 26 años de edad lee un periódico al día y sus preferencias se dirigen hacia los diarios con más color, como revistas pequeñas. Supuestamente, el formato A5 atrae más al lector, que lee más al enfrentarse a textos más cortos.

El entorno gráfico previsto para el ‘e-periódico’ emplea, en su banda derecha, el código de colores de Internet para indicar, en azul, las páginas consultadas; mientras en la franja inferior se recogen servicios complementarios como ‘libros electrónicos’ (‘e-books’), sección de viajes, bolsa o guía de televisión. Otro índice recoge las noticias locales y en cada sección se informa del número de páginas disponibles, cuáles han sido ya consultadas y cuántas están pendientes.

Por supuesto, no se renuncia a la interactividad y se prevén anuncios personalizados y la incorporación de cupones de descuento en forma de código de barras para su lectura en los comercios correspondientes.

José Alonso Seco

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